Sal32 - kzu/VocabularioTeologiaBiblica GitHub Wiki
El Antiguo Testamento
SALMOS
SALMO 32
- De David. Poema.
¡Feliz el que ha sido absuelto de su pecado
y liberado de su falta!
- ¡Feliz el hombre a quien el Señor
no le tiene en cuenta las culpas,
y en cuyo espíritu no hay doblez!
- Mientras me quedé callado,
mis huesos se consumían entre continuos
lamentos,
- porque de día y de noche tu
mano pesaba sobre mí;
mi savia se secaba por los ardores del verano.
- Pero yo reconocí mi pecado,
no te escondí mi culpa,
pensando: «Confesaré mis faltas al Señor».
¡Y tú perdonaste mi culpa y mi pecado!
- Por eso, que todos tus fieles
te supliquen
en el momento de la angustia;
y cuando irrumpan las aguas caudalosas
no llegarán hasta ellos.
- Tú eres mi refugio,
tú me libras de los peligros
y me colmas con la alegría de la salvación.
- Yo te instruiré,
te enseñaré el camino que debes seguir;
con los ojos puestos en ti, seré tu consejero.
- No sean irracionales con el caballo y la
mula,
cuyo brío hay que contener con el bozal y el freno
para poder acercarse.
- ¡Cuántos son los tormentos del malvado!
Pero el Señor cubrirá con su amor
al que confía en él.
- ¡Alégrense en el Señor,
regocíjense los justos!
¡Canten jubilosos los rectos de corazón!