Sal141 - kzu/VocabularioTeologiaBiblica GitHub Wiki
El Antiguo Testamento
SALMOS
SALMO 141
- Salmo de David.
Yo te invoco, Señor, ven pronto en mi ayuda;
escucha mi voz cuando te llamo;
- que mi oración suba hasta ti como el
incienso,
y mis manos en alto, como la ofrenda de la
tarde,
- Coloca, Señor, un guardián en mi boca
y un centinela a la puerta de mis labios;
- no dejes que mi corazón se incline a la
maldad,
o a cometer delitos con hombres perversos.
¡No, nunca gustaré de sus manjares!
- Que el justo me golpee como amigo y me
corrija,
pero que el óleo del malvado no perfume mi cabeza:
yo seguiré oponiendo mi oración a sus maldades.
- Sus príncipes cayeron
despeñados,
esos que se complacían en oírme decir:
- «Como una piedra de molino hecha pedazos
están esparcidos nuestros huesos
ante las fauces del Abismo».
- Pero mis ojos, Señor, fijos en ti:
en ti confío, no me dejes indefenso.
- Protégeme del lazo que me han
tendido
y de las trampas de los que hacen el mal.
- ¡Caigan los malvados en sus
propias redes,
mientras yo paso sin hacerme daño!